Cada año, Amsterdam recibe a más de 18 millones de turistas.
Es una de las ciudades más visitadas de Europa. Pero no solo es la marihuana legal, la red light district y sus museos las razones por las que esta ciudad es tan atractiva. Amsterdam es una ciudad auténticamente divertida y social, con un ambiente abrasador donde es casi seguro que vivirás
una experiencia totalmente fuera de lo común.
Conocido como el «Canal Parade», organizado por empresas privadas y distintos colectivos, es el evento más importante de las fiestas del Orgullo LGTB.
El desfile de más de 80 barcos al estilo carrozas recorren varios kilómetros por uno de los canales centrales de la ciudad.Es un verdadero espectáculo de excentricidad, celebración y reivindicación al que se suman
más de medio millón de personas al rededor de las calles, en lanchas y desde los balcones.
Amsterdam es la ciudad sin cortinas, de naturaleza bohemia y libertaria. Son cientos de nacionalidades las que conviven en esta comunidad y por lo tanto es una de las ciudades más multiculturales del mundo. Es natural que en una celebración como esta se puedan observar todos los tonos de piel, rasgos y géneros que se pueda imaginar. Durante estas fechas, Amsterdam se convierte en el epicentro de la libertad sexual y cultural.
Quizá haya que entender el clima de Holanda para entender un poco la cultura holandesa. Aunque todo el año es bueno para visitar este país, hay que saber que el invierno es verdaderamente frío y la primavera, a pesar de ser cuando florecen los tulipanes, es muy lluviosa. La llegada del verano es cuando realmente se puede aprovechar el máximo disfrute de esta ciudad. No es casualidad que estas fiestas coinciden con el inicio del mes de agosto, cuando el sol, las calles y los canales llaman a la fiesta al aire libre.
El recorrido del Canal Parade dura aproximadamente 5 horas, dando inicio a las 12h y terminando a las 17h. Pero ese es solo el inicio de la fiesta, una vez finalizado el desfile dan inicio los conciertos en las plazas de la ciudad, siendo los de Amstelveld, la plaza Dam y Rembrandtplein los más famosos.
Dicen que el destino ideal nunca es un lugar sino una nueva forma de ver la vida. Amsterdam es todo eso y mucho más; una nueva filosofía, una forma distinta de entender la sociedad, la humanidad y la convivencia. Amsterdam te enseña que un mundo diferente es posible.